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Nissan echa el cierre en España y deja sin trabajo a 3.000 empleados directos y 20.000 indirectos

Industria lamenta la decisión final e insiste en que la continuidad de la planta catalana «es posible».

La fábrica de Nissan en Barcelona echará definitivamente el cierre después de un mes de incertidumbre que había llevado a los trabajadores a una huelga indefinida ante el temor por el futuro de la plana, circunstancia que será realidad en pocas horas. Los ejecutivos de la firma japonesa anunciarán esta decisión en la rueda de prensa de presentación de resultados y el plan estratégico de la compañía, que ya no cuenta con las históricas instalaciones ubicadas en la Zona Franca de la capital catalana.

Así se lo ha hecho saber la dirección del grupo a los representantes de los trabajadores de una planta que emplea a casi 3.000 personas de forma directa y repercute en otras 20.000 de forma indirecta. El impacto en la economía catalana, azuzada ya por la crisis del coronavirus, será relevante, a la espera de conocer cuál será el plan de transición hacia el cierre definitivo. Desde las 08.30 horas, la compañía mantiene una reunión con los sindicatos para explicarles el futuro de la planta.

La fábrica de Zona Franca -la más importante- ha ido perdiendo carga de trabajo de manera paulatina en el último año, lo que llevó ya a finales de 2019 a plantear un ERE con 600 prejubilaciones, mientras que la planta trabajaba por debajo del 30% de su capacidad.

El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo ha lamentado la decisión de la compañía y ha propuesto la creación de un grupo de trabajo para estudiar «escenarios alternativos» que garanticen la continuidad de la actividad industrial. El departamento que dirige Reyes Maroto considera que la continuidad de la planta de Barcelona «es posible», tal y como recoge el plan de viabilidad que presentó el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo hace unos meses en colaboración con la Generalitat de Cataluña, el Ayuntamiento de Barcelona y el Consorcio Zona Franca.

La ministra de Industria, Reyes Maroto, había indicado esta misma semana que el Gobierno trabajaba junto con la dirección de la compañía japonesa en un plan de inversiones para garantizar la viabilidad de sus plantas ubicadas en territorio nacional. Encima de la mesa había una serie de medidas y un plan de inversiones para las plantas que Nissan tiene en España para garantizar la viabilidad de las mismas y el empleo. Maroto indicó que «estamos trabajando en reforzar ese plan para que el futuro de las plantas de Nissan en España esté garantizado y creemos que definitivamente podemos dar una tranquilidad a los trabajadores».

La pandemia del coronavirus no ha hecho más que empeorar la situación y en estos momentos la fábrica está parada, con una huelga indefinida que afecta a parte de la plantilla, mientras que el resto continúa afectada por un ERTE.

Aunque ya ayer la alianza automovilística Renault-Nissan-Mitsubishi presentaba su nueva estructura operativa en la que se contempla ceder el liderazgo a cada una de sus marcas en cada territorio, país o continente, donde serán la referencia de cada familia de modelos. En el caso de Europa, Renault liderará esa estrategia en detrimento de Nissan.

Las ventas globales de Nissan Motor cayeron un 41,6% en abril pasado respecto al mismo mes de 2019 y en los primeros cuatro meses de este año acumula una reducción del 31,1 %, anunció este jueves la compañía.

Al igual que otras firmas del sector, Nissan Motor se ha resentido este año por la caída en la demanda global de vehículos a causa de las derivaciones de la pandemia de coronavirus, que ha obligado a suspender la producción en muchas plantas de la compañía.